¿Qué sentido tiene el papel inflamatorio del tejido adiposo?
- Ana San Martín
- 28 may 2022
- 1 Min. de lectura
Hasta ahora hemos visto que un exceso de tejido graso mantenido en el tiempo nos puede llevar a un estado de inflamación de bajo grado con el consiguiente desarrollo de enfermedades relacionadas.
Sin embargo, esta no es una situación fisiológica, sino una patológica a la que se le ha puesto el nombre de obesidad.
En situaciones fisiológicas, en las que no hay inflamación de bajo grado y donde la cantidad y distribución del tejido adiposo es óptima, la actividad proinflamatoria del tejido adiposo tiene un sentido y una función perfectamente regulada.
Cuando se producen determinados tipos de infecciones el sistema inmune requiere de una respuesta inflamatoria, energética y contundente
En este sentido, el disponer de suficiente tejido graso nos permite responder generando este tipo de inflamación de forma aguda y supone una protección contra infecciones puntuales.
Por otro lado, niveles de tejido graso extremadamente bajos, pueden suponer una menor capacidad para afrontar infecciones agudas.
Por lo tanto, la actividad proinflamatoria del tejido graso, dentro de una situación fisiológica, nos ayuda a protegernos ante determinadas amenazas de forma puntual.
El problema no es la capacidad proinflamatoria del tejido adiposo, sino un exceso de actividad de éste debido a:
- La acumulación patológica de grasa en exceso (obesidad)
- Carencia de masa muscular
- Falta de actividad física
- Otros procesos que pueden provocar inflamación de bajo grado
.
Comentarios